México financia su propia invasión militar y/o paramilitar
Increible pero cierto!
LA LUPA POLÍTICA ¿Calderón paga US$7,000 millones para que EU invada a México? |
POR ALFREDO JALIFE-RAHME |
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El Plan México, rebautizado (debido al rechazo nacional) como "Iniciativa Mérida" (¡Bomba!), emergió con toda su crudeza y exhibe en su desnudez la invasión silenciosa de EU desde México (con todo y la muralla ignominiosa que dejó construir la entreguista dupla panista Fox-Calderón) hasta Colombia, lo cual se pudiera resumir de la siguiente manera: Calderón paga US$7,000 millones para que EU invada a México.
Los amanuenses de EU en México muy bien colocados en los multimedia locales por Salinas, Zedillo, Fox y Calderón (ya ni guardan las formas: son tan pornográficos que dan lástima ajena; sobre todo el beltronista-televiso-raulista/salinista "Cero" Gómez Leyva)- no saben como defender al indefendible embajador castañedista en Washington: el armenio Arturo Sarukhán Casamitjana, quien develó que el "México neoliberal" pagaría cinco veces más que EU (el beneficiado principal por el plan.)
Antes que el muy errático Sarukhán Casamitjana develara el monto a Carmen Aristegui, una de las óptimas comunicadoras de toda Latinoamérica, lo cual provocó furor nacional, la prensa de EU lo había publicado desde hace mucho. Un servidor lo expresó mucho antes que el mismo armenio Sarukhán Casamitjana a NBC en español, justamente basado en las fuentes primarias de EU.
Recordemos la identidad apátrida, traidora y entreguista (como los mercaderes de los multimedia locales quienes intentan defender lo indefendible) del armenio castañedista Sarukhan Casamitjana: encargado de la delegación mexicana a la reunión secreta de Banff (Canadá) con militares de EU, que develamos en su momento en La Jornada, para profundizar la invasión militar y/o paramiltar (en EU desde el "outsourcing" bélico,es decir, la deslocalización mercenaria de la globalización, se perdieron las fronteras entre soldados y civiles como exhibió la invasión de Irak, que cuenta con 160 mil soldados propiamente dichos y 180 mil mercenarios de la siniestra empresa multihomicida Blackwater USA.)
El Plan México, disfrazado en "Iniciativa Mérida" (¡Bomba!), mostró en su patente mediocridad a la secretaria de Relaciones Exteriores, Patricia Espinosa, sobre quien ni vale la pena perder el tiempo; es una vulgar operadora de las tareas sucias ajenas, y quien si tuviera un mínimo de dignidad debía ya haber presentado su renuncia después de su acrobacia y contradicciones.
Desde el 16 de agosto pasado, la revista neoliberal británica The Economist se había quitado las máscaras cuando develó la existencia del "Plan México", que catalogó como un "acuerdo muy cercano de ayuda anti-drogas" de EU para México.
Después de hacer el recuento de la guerra (por cierto,perdida) contra los poderosos cárteles de la droga, entablada por Calderón a partir de su caótica y controvertida toma de posesión -lo cual arrojó centenas de muertos y varias cabezas decapitadas ,además de la intervención del ejército a nueve estados (la tercera parte del país en términos numéricos)-, la influyente revista británica (portavoz del modelo neoliberal) da a entender que Calderón sucumbió a las fuertes presiones de EU para aceptar un "paquete de ayuda" al estilo del Plan Colombia. Pero, ¿cuál "ayuda", si México, el país invadido paga siete veces mas que el beneficiado?
En ese momento, The Economist filtró que los "detalles están cerca de ser finalizados" y se esperaba el anuncio en la reunión tripartita en la reunión de Québec entre Bush. Calderón y Harper. Algo pasó que no surgió el anuncio en Québec y, luego, tampoco Calderón acudió a la Asamblea General de la ONU.
Lo más interesante radica en que, a juicio del The Economist, el Plan México representa una calca del Plan Colombia, mediante el cual EU aportó una ayuda de US$5,000 millones en los recientes siete años, es decir, alrededor de unos miserables US$700 millones AL AÑO, lo cual es una verdadera ganga para ocupar militarmente a un país estratégicamente situado como el bi-oceánico Colombia.
Las autoridades mexicanas, en especial el procurador Eduardo Medina Mora, han aceptado que la "ayuda" versará en "equipo y entrenamiento".¿Dónde se entrenarán los "reclutados", en EU o en México? Si es en México, pues es inevitable la presencia militar estadounidense. Se recuerda que en Colombia operan varias centenas de militares estadounidenses bajo la cobertura de "consejeros" y "entrenadores". Así que pronto veremos aviones de EU con toda su panoplia de espionaje selectivo y colectivo.
¿Sabrá Calderón que significa "seguridad nacional"?
Otra de las motivaciones expuestas por los teóricos del Plan México aducen que la "ayuda" servirá para mejorar los salarios de una policía "corrupta e inepta", y muy susceptible a las regalías de los cárteles. El salario del ejército no mejorado y no hay que olvidar que sus "recursos humanos" provienen en su aplastante mayoría de las zonas paupérrimas del sur país (60 por ciento de Oaxaca, 20 por ciento de Chiapas, y el restante 20 por ciento de los llamados estados "jodidos" -como Guerrero.)
Se habla que el año pasado alrededor de 120 mil soldados desertaron, del total de mas de 350 mil soldados, lo cual representa una verdadera hemorragia.
No existe ningún estudio de factibilidad económica que exhiba el monto que se requiere para la mejora salarial de nuestros militares. Tampoco se sabe si los "entrenados" pertenecerán a la policía o al ejército (como los "Zetas".)
En retrospectiva, se puede generar la hipótesis de que la deliberada guerra fracasada contra los cárteles pudo haber sido un montaje calderonista para atraer al ejército de EU a suelo mexicano.
Por lo menos tendremos a las empresas de EU especializadas en arrojar sustancias que destruyan los plantíos de estupefacientes, lo cual resulta un redituable negocio, pese al daño para la salud que ha sido señalado pro organizaciones de derechos humanos sin la menor receptividad del gobierno de EU.
Se desconoce si el Plan México ha sido empujado cuando en la actualidad existen fuertes tensiones debido al maltrato a los migrantes mexicanos.
Existe un leve problema: el acuerdo un tanto cuanto cupular y arcano entre Bush y Calderón, a espaldas de sus ciudadanos, necesita la aprobación del Congreso de mayoría demócrata, de por sí hostil al Plan Colombia.
En EU, en la etapa electoral todo lo que suene a "mexicano" es repelido por los votantes.
Nadie dice que el Plan Colombia ha tenido poco, para no decir nulo, impacto en el flujo de cocaína a EU: el primer consumidor mundial per capita.
Lo mismo se vaticina sucederá con el Plan México, que será la repetición de un plan fracasado, el Plan Colombia.
Luego entonces, deben existir otras motivaciones ajenas al narcotráfico para el adiestramiento estadounidense y/o la presencia militar en calidad de "consejeros" en suelo mexicano y ésta no podría ser otra más que la vigilancia de los yacimientos petroleros y gaseros mexicanos como el anterior secretario de Energía foxiano, el regiomontano Fernando Elizondo Barragán había anunciado la presencia militar del Pentágono en las instalaciones de PEMEX.
Recordemos que el saltimbanqui regiomontano Elizondo, un anterior gobernador priista, ahora disfrazado de senador panista, sustituyó a Calderón, expulsado por Fox de su breve estancia sietemesina en la misma Secretaría de Energía.
Muchos hemos preguntado si no fue el mismo Calderón quien colocó al Pentágono en los yacimientos petroleros y gaseros de México, lo cual le valió que le regalaran la presidencia con el fin de rematar a PEMEX en beneficio de las trasnacionales texanas y españolas.
El saltimbanqui Elizondo le cubrió las espaldas a Calderón de su malos manejos internos en la Secretaría de Energía, en donde brilló intensamente César Nava (el yerno de la poblana pueblerina y "directora del hilarante Instituto de Migración de la Secretaría de Hibernación, perdón, de Gobernación, que dizque dirige Ceci Romero), su actual secretario particular en Los Pinos y anterior abogado juvenil de "contratos múltiples" de PEMEX.
No hay que olvidar el frecuente manejo mediático del espantapájaros de Al-Qaeda en México, para golpear sus yacimientos petroleros y debilitar el abastecimiento petrolero a EU, el cual ha servido de evidente presión para obligar la remate de PEMEX. Naturalmente que sin necesidad de ser genios se puede vaticinar que, en la tercera fase del control del nepotismo dinástico reyes-herolista de PEMEX, van a arreciar los atentados terroristas, los accidentes extraños, y hasta los náufragos de "mandarinas" que serán endosados al EPR, al cómodo Cartel del Golfo (como ya empezó a manejar Stratfor) y hasta la familia bribonesca, es decir, los hijos de Martita, con todo y su alfombra voladora.
El único beneficio aparente del Plan Colombia radica en que el gobierno podrá capturar amplias zonas bajo el control de la guerrilla y las fuerzas paramilitares.
Nadie salió a desmentir nada menos que a Agustín Carstens (recordemos que se trata del secretario de Hacienda calderonista), quien fustigó que las armas de los cárteles eran vendidas por EU !Orale!
Es decir: si entendemos bien a Carstens, entonces EU, mediante la venta obscena de armas a los cárteles de la droga, mejor pertrechados (hasta con misiles; si no que le pregunten al chino) que el ejército mexicano, re-incendian un problema añejo que luego pretende "resolver" con la invasión militar silenciosa desde México hasta Colombia, lo cual evidentemente resguarda otra agenda oculta que no tiene nada que ver con el combate al narcotráfico: un montaje hollywoodense más de Bush al que parece haber sucumbido Calderón, quien incluso se da el lujo de financiar la invasión militar y/o paramilitar con los impuestos de los mexicanos.
¿No sería mejor que EU cuidase mejor su frontera del lado mexicano, hoy totalmente desfondada,en forma paradójica, sobre todo después del montaje hollywoodense del 11/9?
No hay que olvidar que los célebres "Zetas", un cuerpo de elite del ejército mexicano, fueron "entrenados" por EU, y menos dejar de lado que las armas que usan los cárteles, que incluyen misiles que no posee el mismo ejército (se comenta que incluso poseen submarinos que tampoco posee la armada mexicana), son vendidos por los mercaderes de armas de EU muy bien lubricados y cobijados por su "complejo militar-industrial". ¿Va a cesar este negocio bidireccional estadounidense al flujo y al reflujo?
Parte del problema radica en que EU posee leyes desreguladas en la posesión de armas de alto-calibre fácilmente asequibles por los cárteles ¿Por qué no atacar esta parte de la ecuación bilateral?
Parecería que existen otros motivos geopolíticos para aplicar el Plan Colombia y su calca, el Plan México, que subsumen verdaderos pre-posicionamientos militares que de facto avanzan la frontera de EU, primero, hasta el sur de México (en espera de los resultados electorales en Guatemala donde será elegido el "Calderón guatemalteco"), para, en una segunda etapa, vincularlo con el Plan Colombia como una nueva "zona de amortiguamiento", integral e integrada militarmente, para impedir que los pletóricos y múltiples enemigos globales de EU utilicen a México como plataforma de atentados "terroristas" y cobro de facturas.
De hecho: Calderón, con el Plan México, rebautizado "Iniciativa Mérida" (¡Bomba!), se incorpora a la agenda bushiana "contra el terrorismo global" y adopta los mismos enemigos de Bush como suyos propios.
Será interesante vislumbrar si la recuperación de zonas bajo el control del los cárteles de la droga en México colindan con los yacimientos petroleros, en particular, en la Sonda de Campeche, donde se encuentran las mayores reservas petroleras y gaseras del país.
Los planes siameses Colombia y México parecen más bien verdaderas ocupaciones militares que no se atreven a pronunciar su nombre y que resguardan objetivos aviesos: estratégicos y energéticos -tanto de ofensiva como de defensiva militar-, en momentos en que EU puede sufrir represalias de parte de sus incontables enemigos por sus fallidas aventuras bélicas en el mundo en general y el Medio-Oriente en particular.
El Plan Colombia, concebido precautoriamente en 1998, fue concretado con la ayuda pecuniaria, en vísperas del 11/9, bajo los auspicios del Comando Sur de EU.
El Plan México, surge seis años después al 11/9, cuando es exhumado el ASPAN, que ahora ha sustituido al fracasado TLCAN, pero bajo los auspicios del Comando Norte.
No hay que extraviarse demasiado en conjeturas: el Plan México, rebautizado "Iniciativa Mérida" (¡Bomba!) es la punta de lanza del ASPAN (el sucedáneo del fracasado TLCAN) para controlar los energéticos mexicanos y forma parte de la invasión militar y/o paramilitar silenciosa por EU de México hasta Colombia (pasando por Guatemala bajo la misma coartada de los estupefacientes y el crimen organizado.)
Lo insólito: es la primera vez en la historia de la humanidad que un país, en este caso especifico México, en la etapa de descomposición panista-calderonista, financia su propia invasión militar y/o paramilitar.