Vista previa
LE NOUVEAU GOUVERNEMENT MEXICAIN EST ENTRE EN GUERRE SAINTE CONTRE SON PROPRE PEUPLE. ARRESTATIONS ARBITRAIRES D'HOMMES POLITIQUES COMME DE SIMPLES PASSANTS QUI AVAIENT LE MALHEUR DE SE TROUVER AU MAUVAIS ENDROIT AU MAUVAIS MOMENT, GENERALISATION DU VIOL DES PRISONNIERES, DE LA TORTURE Y COMPRIS SUR DES ENFANTS DE HUIT A DOUZE ANS , CENSURE DE TOUTE OPPOSITION... LA LUTTE NE FAIT QUE COMMENCER. El nuevo gobierno mexicano a entrado en guerra santa contra su propio pueblo. Imposición, traición, doble discurso, ruptura del pacto social, ningún respeto por los derechos humanos con la consiguiente tortura, prisión, muerte de luchadores sociales e inocentes. Censura y desprecio por la cultura y la educación.... LA LUCHA COMIENZA.

samedi 2 juin 2007

Julio Hernández López

Jornada

Astillero

Corte chavista

Legítimo, no renovar concesiones

Flan Nacional de Puro Rollo

Los tigres rayados del IFE

Un lamentablemente decisorio número de chavistas, disfrazado de ministros de la Suprema Corte Bolivariana de Justicia, aprobó ayer un grave atentado contra la libertad de expresión, al reivindicar la propiedad del Estado sobre su espectro radioeléctrico y, por tanto, su facultad soberana de renovar o no las concesiones a empresas de televisión. Infectados de feos virus autoritarios y dictatoriales, los izquierdistas disfrazados de jurisperitos infiltraron en el sacro recinto de la Corte conceptos anticuados y populistas como "rectoría del Estado" y "propiedad del Estado sobre los bienes públicos", e incluso se atrevieron a postular que los concesionarios en materia de televisión "no son intocables" ni tienen derechos irreversibles sobre bienes públicos (¡ya las pagarán esos ministros desobedientes cuando sustituyan a Bartlett y Corral en la programación de escarnios en pantalla!).

La comunistoide medida (que significa estatuir que un presidente patriota -es decir, no en los próximos cinco años y medio- pueda usar la posibilidad jurídica de no renovar concesiones a las nativas versiones golpistas de Radio Caracas Televisión) echó abajo el agandalle del año pasado con el que Televisa y Tv Azteca se habían proveído de una amable renovación en automático de sus concesiones e incluso de una magna expansión gratuita. Ahora, cuando menos, deberá haber una licitación pública con preferencia para los actuales titulares de concesiones, pero el Estado mantendrá su absoluto derecho a renovar o no los tales permisos.

El Presidente LegaL mostró además su faceta militarmente Palacio. Se asomó a los recintos prohibidos frente a los cuales está el Zócalo y, para prevenir vulgares manifestaciones de protesta, se permitió convertir la Plaza de la Constitución en una sucursal de Metálica, con cientos de vallas instaladas para proteger la presentación formal de un Plan Nacional de Desarrollo, a la que asistieron unos 20 gobernadores, presidentes municipales, dirigentes partidistas y de fracciones legislativas, miembros del gabinete, políticos en general y demás fauna trajeada que puso cara de solemnidad republicana en esa reunioncilla cuya verdadera definición estaba en el cerco castrense necesario para presentar un acto de presunta congruencia de voluntades ciudadanas libres. ¿Y si en lugar de Plan Nacional de Desarrollo, Calderón presentara el verdadero proyecto en curso, el Plan Nacional Militar?

No me ayudes, compadre Sojo, podría decirle el PrEsidente deL EmpLEo a su secretario foxista de Economía, pues ayer el Eduardo heredado dijo que sí se podrán cumplir las promesas felipenses (incluidas en el mencionado Flan Nacional de Puro Rollo) de crear 800 mil plazas laborales al año y llegar a un crecimiento económico de 5 por ciento en 2012, que se sostendría por años, pero siempre y cuando... Los abonados a esta columna echen ojo a las palabras de Sojo (con comentarios entre paréntesis por cortesía de esta columna metiche) y digan si de verdad el funcionario mencionado está garantizando cumplimiento de promesas o nomás está choreando: "Yo creo que si nos ponemos las pilas (uhhhh), ahora que tenemos ya la estabilidad (juar, juar, musicalizado con cuernos de chivo y protestas sociales), hacemos lo que tenemos que hacer (no, pos sí: "A ver, paisito calderónico, ¿por qué no hizo la tarea económica? No, pos es que los ñiños de la schooela no hacieron lo que teñían que hacir) y retomamos las estrategias que mencionó el presidente Felipe Calderón (¿Estrat...what?), sin duda alguna yo creo que podemos alcanzarlo".

En otra estación del cuadrante, los consejeros del Instituto del Fraude Electoral se toparon con la flamígera proposición de que en 10 días se procediera a partirle su mandarina en gajos a la de por sí ya muy arreglada y maquillada papelería electoral correspondiente al atraco del año pasado. La consejera Lourdes López (k eN Sw kSa La KoNoZ3n) exhortó a sus contlapaches con lógica propia de rufianes felinos bien manchados: "¿Cuándo va a ser? Si esto no se decide ahora, por esperar algo que no se sabe si existe, va a ser otra rayita más al tigre". Ansiosa por desaparecer las pruebas de un delito que ni se sabe si existe, resultó tan obvia la consejera rayada (es de Nuevo León, de donde son los Rayados, y fue mandamás electoral en Coahuila, donde anularon elecciones federales por irregularidades que la gran Lulú nunca alcanzó a prever o impedir) que sus congéneres prefirieron guardar las formas un ratito más, sobre todo porque aún hay recursos judiciales por resolver que han sido presentados por ciudadanos que aún creen posible demostrar la mapachada de 2006. Prudente, el Tigre Ugalde dixió, con musha correxión: "No tenemos prisa, hay qué tomar esa decisión con más cuidado".

Astillas

El cargo de defensor de los derechos humanos no puede ejercerse eficaz y dignamente si no es con la aprobación, así sea silenciosa, de los presuntos protegidos. Sólo si se está cumpliendo con una encomienda facciosa, o se tiene mucha necesidad de la chamba, es que un personaje público se habrá de obstinar en mantenerse en un cargo sonoramente impugnado por un amplio segmento social. A partir de ahora, cada paso, cada acción de José Luis Soberanes estará marcada por la duda y la desconfianza. Si en realidad buscara el fortalecimiento de la CNDH, el opusdeísta titular actual debería dejar de contaminar a ese desgastado órgano con su bagaje personal... Y, mientras Eduardo Medina Mora se queja de que en México no hay la buena policía que la administración federal anterior, de la que él formaba parte, tanto presumió, ¡feliz fin de semana, a un mes de la recordación central del fraude electoral que tiene hoy a México en una crisis que las buenas conciencias se niegan a ver e incluso se atreven a aplaudir!

Carniceria

Jornada

Estados Unidos: masacre y responsabilidad bipartidista

Durante el mes que terminó ayer las fuerzas armadas estadunidenses perdieron a 123 efectivos en Irak. El dato indica que mayo de 2007 ha sido, después de abril de 2004 (137 muertos), el periodo más mortífero para los ocupantes en los 50 meses y medio transcurridos desde que el presidente George W. Bush ordenó la invasión del infortunado país árabe. Pero, a diferencia de ese abril negro, cuando los invasores tomaron a sangre y fuego y arrasaron la ciudad rebelde de Fallujah, no ha habido en los 30 días pasados ninguna ofensiva de gran escala capaz de explicar este ritmo de más de cuatro muertes diarias entre las tropas ocupantes, bajas que ascienden ya a 3 mil 474 para Estados Unidos, a 147 para Inglaterra y a 127 para los contingentes menores que acompañan la agresión, lo que hace un gran total de mil 532 invasores fallecidos.

Otros datos que ilustran el tamaño de la catástrofe militar que enfrenta Washington en Irak son los 34 mil 650 heridos o "evacuados médicos" registrados por las fuerzas estadunidenses desde el comienzo de la guerra, los 111 efectivos que en el curso del conflicto han cometido suicidio o se han provocado a sí mismos heridas graves y el número indeterminado (muy superior en todo caso a 400) de "contratistas" -término empleado por el Pentágono para referirse a los mercenarios- que han muerto en el curso de la ocupación.

La propagación mediática de estos números reposa, por otra parte, en una inmoralidad flagrante: el silenciamiento, por parte de los medios y gobiernos occidentales, de los daños humanos causados a los propios iraquíes por la guerra que les impuso el gobierno de Estados Unidos. En este punto, la organización Iraq Body Count calcula entre 64 mil y 71 mil muertos, pero otros organismos estiman que la cifra puede ser de 300 mil. La información de lo que se denomina a sí mismo "mundo civilizado" tampoco suele hacer demasiado énfasis en los 123 informadores que han perdido la vida en el conflicto y que proceden, en su gran mayoría, del propio Irak o de otras naciones árabes, islámicas o asiáticas.

Hasta noviembre del año pasado la responsabilidad central por esta intolerable masacre recaía en los gobiernos de Washington y Londres, promotores principales de la destrucción de Irak. Pero, tras las elecciones legislativas de finales del año pasado en Estados Unidos, el conjunto de la clase política de ese país ha decidido convalidar la guerra, la muerte y la violencia que padece la nación ocupada. En efecto, tras lograr la mayoría en ambas cámaras, la oposición demócrata ensayó algunos gestos de rechazo al desatino belicista de Bush, pero acabó por respaldar en los hechos la ampliada presencia militar estadunidense en el territorio iraquí y, con ella, la tarea de muerte, violencia y saqueo que realizan las fuerzas invasoras.

Hace una semana la Cámara de Representantes y el Senado aprobaron un presupuesto de más de 100 mil millones de dólares para financiar el despliegue de las tropas en Irak. Las mayorías demócratas en ambas instancias legislativas renunciaron, adicionalmente, a cualquier condicionamiento efectivo de la operación bélica y a toda idea de calendarizar el retiro de las fuerzas ocupantes. Todo ello pese a que, a estas alturas, es imposible dejar de ver la relación directa entre la ocupación y la violencia que ha sumido al país árabe en una espiral descendente de desintegración nacional.

En este escenario, es comprensible la exasperación de la destacada luchadora pacifista Cindy Sheehan, madre de uno de los soldados estadunidenses caídos en Irak, y quien ha sido, casi desde el inicio de la agresión, la presencia más visible y efectiva de los opositores a la masacre en curso, y una voz de referencia en la conciencia internacional.

Con su respaldo a las políticas genocidas de la Casa Blanca, se ha desvanecido toda diferencia sustancial entre el Partido Demócrata y los gobernantes republicanos y su camarilla de mafias empresariales, únicas beneficiarias de una guerra que agravia al resto del mundo y que debe terminar ya por medio de la única salida posible: que Washington asuma su derrota y saque incondicionalmente a sus fuerzas de Irak.