Vista previa
LE NOUVEAU GOUVERNEMENT MEXICAIN EST ENTRE EN GUERRE SAINTE CONTRE SON PROPRE PEUPLE. ARRESTATIONS ARBITRAIRES D'HOMMES POLITIQUES COMME DE SIMPLES PASSANTS QUI AVAIENT LE MALHEUR DE SE TROUVER AU MAUVAIS ENDROIT AU MAUVAIS MOMENT, GENERALISATION DU VIOL DES PRISONNIERES, DE LA TORTURE Y COMPRIS SUR DES ENFANTS DE HUIT A DOUZE ANS , CENSURE DE TOUTE OPPOSITION... LA LUTTE NE FAIT QUE COMMENCER. El nuevo gobierno mexicano a entrado en guerra santa contra su propio pueblo. Imposición, traición, doble discurso, ruptura del pacto social, ningún respeto por los derechos humanos con la consiguiente tortura, prisión, muerte de luchadores sociales e inocentes. Censura y desprecio por la cultura y la educación.... LA LUCHA COMIENZA.

lundi 26 mars 2007

REFORMA FISCAL?

López Obrador preguntó: "¿De qué reforma fiscal están hablando? En el ejercicio anterior, las empresas pagaron 118 mil millones de pesos de impuestos y los ciudadanos 182 mil, o sea 74 mil millones más que los patrones, y sin embargo, las empresas obtuvieron 60 por ciento del ingreso y los trabajadores 30 por ciento. ¿De qué se trata? Cemex tuvo utilidades de 40 por ciento pero sólo pagó 2.3 por ciento de impuesto. Telmex tuvo ganancias de 50 por ciento y sólo pagó ocho por ciento de impuestos; Kimberly Clark sólo pagó seis por ciento, Coca-Cola, uno por ciento, Bimbo, 1.7 por ciento, Alfa 2.3 por ciento, Carso 2.7 por ciento, Maseca 1.3 por ciento, Wal-Mart 2.4 por ciento y la Bolsa Mexicana de Valores nada, cero por ciento de impuestos; en cambio, los trabajadores, dependiendo de sus ingresos, pagaron entre 15 y 28 por ciento y ahora les quieren, repito, cobrar más impuestos en alimentos y medicinas. No lo vamos a permitir"

Neo panismo

Por esto



Perseverancia en los ideales PDF Imprimir E-Mail
lunes, 26 de marzo de 2007

Por Jesús González Schmal*

Hace 25 años, Pablo Emilio Madero fue el candidato a la Presidencia de la República por el Partido Acción Nacional. Todavía entonces, en 1982, la Secretaría de Gobernación preparaba y realizaba las elecciones en todo el país.

En aquel tiempo, los verdaderos partidos políticos de oposición no recibían subsidio de ninguna especie. Era notorio el dispendio del partido oficial y sus partidos satélites, en comparación con el trabajo voluntario sin remuneración de los activistas de las campañas panistas. Los ingresos del PAN procedían de su sistema de recolección de donativos populares, a través de rifas inicialmente de objetos de línea blanca y después de automóviles económicos, cuyos boletos se distribuían en toda la República. El ahora secretario de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña, fue agente de la Comisión de Rifas del PAN en el estado de Jalisco. Para ese año de 1982 el PAN contó de dicha fuente con un presupuesto de 32 millones de viejos pesos para las campañas de diputados, senadores y presidente de la República.
Pablo Emilio Madero contendió contra Miguel de la Madrid. Su campaña cubrió todo el territorio nacional durante ocho meses. Sin descanso por carreteras, caminos vecinales y brechas, llegó al último rincón de la República. La comisión de organización en manos de don José González Torres Arias le había abierto el camino constituyendo comités municipales, distritales y estatales en prácticamente los 32 estados de la República. La visita del sobrino carnal del "apóstol de la democracia" a los lugares más apartados logró el impacto deseado bajo la consigna "sí se puede, de ti depende", y en las condiciones más adversas, como las que entonces privaban, logró que se le reconocieran 3 millones 900 mil votos, lo que constituyó una proeza que incluso fue encomiada por analistas políticos extranjeros que conocían la realidad mexicana.
Este éxito suscitó la ambición de grupos y organizaciones empresariales, que hasta entonces habían estado reacias a una participación política fuera del partido oficial en el que tenían cabida al grado de gozar de privilegios con el Ejecutivo, que hacía llegarles antes de pasar a las cámaras las iniciativas de presupuestos y reformas que podían afectarles o ser de su interés. El rompimiento de esta regla no escrita por López Portillo en el último año de su gestión, cuando estatizó la banca, fue el resorte que hizo que estos grupos encabezados por Coparmex se lanzaran a la aventura de constituir un partido político que intentaron registrar con el nombre de Desarrollo Humano Integral, A.C. (DHIAC).
Al no lograr los propósitos de un partido propio, optaron por penetrar al PAN y gradualmente lo fueron tomando desde la periferia. Ya para 1988 la penetración era clara y el flujo de amplios recursos de importantes donadores anónimos fue evidente. En la campaña de 1988 cuando se postuló a Maquío Clouthier no obstante la abundancia de apoyos económicos, no logró rebasar la votación que seis años atrás alcanzó la candidatura de Pablo Emilio Madero (400 mil votos menos).
La última estocada de este cambio del PAN se dio cuando, ya siendo presidente del partido Luis H. Alvarez (que llega venciendo por reducido margen a Gabriel Jiménez Remus después de una cuarta votación no prevista en estatutos), se consiguió que el PAN convalidara la exacción a los dineros públicos para los partidos políticos, aceptando para el propio partido los subsidios públicos exorbitantes de los que hasta la fecha goza a plenitud.
Para Pablo Emilio Madero y un grupo importante de panistas (tres ex presidentes nacionales y dos ex secretarios entre ellos) fue inaceptable el giro que dio el partido no sólo por cuanto a condescender con lo que podía ser la pérdida de su independencia (ya para 1992 el PAN recibió una gigantesca aportación de la Cámara de Diputados para construir el edificio que todavía es la sede de su dirección nacional), sino también por la renuncia a su sustento doctrinario, que lo apartaba de su línea ética (el fin no justifica los medios) y programática por la justa distribución de la riqueza y la preeminencia del interés público general sobre el de particulares. Ya para entonces "el neopanismo" se identificaba con la línea liberal de Salinas de Gortari, al que le dio el respaldo para la entrega de México al TLC.

---------------
Pablo Emilio, colaborador por muchos años en estas páginas, murió el pasado 18 de marzo en Monterrey. Honra a su memoria la perseverancia en el ideal democrático, y la persistencia en los valores de la congruencia y honradez en la vida pública.

*Profesor de la Facultad de Derecho de la UNAM.

Los cruzados hipocritas

Jornada

Ciudad Perdida

Miguel Angel Velázquez

La Iglesia católica no ha convencido a sus mujeres

Amenazas que suben de tono

El clero lleva su incapacidad al terreno político

Está de pensarse. La derecha, envalentonada por la impunidad del fraude, ensoberbecida porque a sus agentes nunca les llega la justicia, se ha lanzado a lo que ellos llaman "una cruzada" en contra de la posibilidad de que en la capital de México se permita a las mujeres decidir sobre su cuerpo.

Si las amenazas del narco deben preocupar, aunque siempre tendrán sus limites -no debemos olvidar que a fin de cuentas defienden un negocio-, las que provienen del fanatismo de derecha son doblemente inquietantes, es, si lo pusiéramos en boca de la misma derecha, pero tratándose de sus enemigos: terrorismo.

A este fenómeno de odios, es a lo que se enfrenta ahora el jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard. La idea es meter miedo al funcionario y a los legisladores que promueven el derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo.

Las amenazas han ido subiendo de tono. Primero, se lanzaron a boicotear la página electrónica de la Asamblea Legislativa, luego armaron la intimidación, plantearon dañar electoralmente a Ebrard en una cruzada, es decir, una "expedición militar contra los infieles", según el diccionario de la Real Academia Española; más tarde llamaron refuerzos: Felipe Calderón asumió, con gusto, su postura; desde el Vaticano enviaron a Alfonso López Trujillo, uno de sus agentes más conspicuos; los señores del dinero, y de las ostias formaron un solo flanco con Calderón, para señalar, seguramente, que ellos también son cruzados, y por fin, en boca del fascismo se le hizo saber que pagará "un costo de sangre" si la despenalización del aborto se convierte en ley.

Los datos, dados a conocer por la Secretaría de Salud del Distrito Federal, no forman parte del criterio de la derecha, por más explícitos que sean, y por más que adviertan el peligro que un embarazo no deseado significa para las madres. Harto se ha advertido que un aborto inseguro es un problema de salud pública y justicia social, y pese a todas las proclamas de la Iglesia, y a la defensa discursiva de la derecha civil, las mujeres siguen abortando.

Hoy, según las cifras de la propia Secretaría de Salud, en el DF se practican aproximadamente mil 500 abortos clandestinos por año; pueden ser, esto hay que recalcarlo, muchísimos más, lo que hace patente la necesidad de evitar el peligro de muerte al que se enfrentan las mujeres que lo aceptan como necesidad.

Lo peor de todo ello es que la intención de la Iglesia es intervenir directamente en las políticas del Estado. Las cifras demuestran que una cantidad enorme de las católicas no escuchan a su Iglesia, y esa es la verdadera lucha que deberían tener los curas.

Para las mujeres católicas y, sobretodo, para las que no lo son, las amenazas de ex comunión son menos importantes que soportar el embarazo no deseado. Es claro que la Iglesia, en ese caso, no ha podido convencer a sus fieles pero, como es costumbre, pretende imponer desde la ley terrena la imposibilidad de hacer valer sus preceptos clericales.

La Iglesia, entonces, ha fracasado con sus mujeres, y ahora lleva al terreno político su incapacidad. Con sus amenazas no podrán, por ningún motivo, evitar el aborto de quienes así lo deseen, pero sí lograrán poner en peligro sus vidas, así que bien visto, el conflicto es, nada más, otro intento de la derecha por apoderarse de los quehaceres del Estado. Ya lo dijo el asesino de Alvaro Obregón, José León Toral, quien padecía, según sus defensores, "delirio razonante de los perseguidores de tipo místico": "Quiero que reine Cristo Rey, pero no a medias, sino completo".

La Convención

Contra lo que muchos suponían la gente sí acudió al llamado de López Obrador a la Convención Nacional Democrática. No fueron los ríos de otras ocasiones, es evidente que después del fraude muchas personas perdieron la esperanza de que la política pueda ser una opción de cambio. Por lo menos ayer se demostró, a todo color, y pese a todo, que esto no ha terminado, más bien apenas empieza. En cambio, Calderón no ha podido lograr el consenso ni siquiera de los que dicen que votaron por él. ¿Verdad que sí hay diferencias?

Sueños guajiros en babalandia

Jornada

México SA

Carlos Fernández-Vega

Bola de cristal cuando la realidad se aleja del discurso oficial

ING Comercial América, seguro con trampa

Foto: Niña en una colonia marginal de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas
Niña en una colonia marginal de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas Foto: Víctor Camacho

Con un modelo que mantiene a tres cuartas partes de los mexicanos fuera de la jugada, que registra raquíticas tasas de crecimiento desde hace tres lustros, y que lo único que ha logrado es concentrar lo de por sí concentrado, no falta el iluso que, micrófono en mano, se la pase pronosticando que "en unos cuantos años más" México será la cuarta potencia económica mundial.

Cinco gobiernos consecutivos no han podido con el paquete, pero ello no arredra a los optimistas, y mientras ellos hacen fabulosos pronósticos sobre el hipotético futuro económico nacional, algunos organismos internacionales mantienen la pésima costumbre de ponerle cifras a la realidad mexicana, la cual se aleja cada vez más del discurso oficial y sus maravillosas predicciones.

Durante el gobierno del "cambio", mientras la economía real rodaba, el discurso oficial la ubicaba cada vez más arriba; de la "décima posición" mundial en la que la acomodó al inicio de su paso por Los Pinos, Fox cerró el sexenio cantando victoria porque "ya somos la octava". Ello, al tiempo que organismos como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional la situaba en los escalones 12 y 14, respectivamente, con ganas de clasificarla aún más abajo.

Arrancó la "continuidad" y lo único que se modificó fue la perspectiva descendente de la cacareada "octava" economía mundial. En 2007, si las cosas caminan bien, el crecimiento económico del país será una cuarta parte menor a la de 2006, y la tasa resultante será la más baja de los últimos cuatro años. Ello, sin embargo, no opaca la bolsa de cristal del nuevo inquilino de Los Pinos, quien ya ve a tiro de piedra que México se convierta en la "cuarta" potencia económica internacional.

Mientras el michoacano se entretiene con el juego foxista, alguien más serio, la Cepal, documenta la verdadera ubicación que la economía mexicana alcanzó en 2006: tras un sexenio pletórico de logros de micrófono (a la par del que inicia), México y su enclenque economía logró colarse al decimocuarto escalón (de 20 en total), pero no a nivel mundial, sino latinoamericano.

Todo un logro si se le compara con el eufórico discurso del "cambio" con "continuidad", pero sobre todo cuando uno se entera que la poderosa economía mexicana sólo pudo colocarse por arriba de potencias económicas como Bolivia, El Salvador, Nicaragua y Haití, y estar a la par de Guatemala.

Con la solidez mostrada en los últimos cinco lustros, más la ubicación real en la comunidad latinoamericana al cierre de 2006 (con ganas de empeorar en 2007), la bola de cristal de Los Pinos no requiere limpieza, sino reposición, y esa frase ya célebre de que en "unos cuantos años" la economía mexicana será la cuarta potencia mundial bien podría incorporarse a la nueva edición (actualizada) de las sandeces del inquilino de Los Pinos en turno.

Las naciones latinoamericanas que mayor crecimiento económico registraron en 2006 constituyen parte del "eje del mal" (versión regional, según clasificación de la Casa Blanca): Venezuela (10 por ciento) y Argentina (8.5), aunque si se incluye al Caribe la cereza se la llevó Cuba, con 12.5 por ciento.

En Los Pinos tendrán que aplicarse, porque si el balance del "cambio" con "continuidad" (lo que lleva) es bastante enclenque, en 2007 la cosa se va a poner un poco más seria. De acuerdo con la Cepal, la economía mexicana mostrará mayor lentitud que el año previo, y a nivel regional la perspectiva es favorable, pero "no tanto".

El organismo prevé que para el próximo año el contexto internacional continuará siendo positivo para la región, aunque menos favorable que el de 2006, dado que se espera una desaceleración del crecimiento mundial, que se situaría en torno a 3 por ciento. La probable desaceleración de la economía estadunidense podría ir acompañada de un proceso similar en Japón y en la zona del euro, aunque de menor magnitud.

El crecimiento del PIB regional durante 2007 (el menor de los últimos cuatro años, de acuerdo con sus propias proyecciones) se sustenta en la existencia de un entorno macroeconómico interno sano y en el impacto que tendrá sobre la demanda interna este mismo proceso continuo de expansión. Esto es un hecho muy auspicioso, ya que en el pasado la región siempre sufrió de un elevado grado de volatilidad macroeconómica que conspiró contra la inversión, con lo que los países vieron afectada su capacidad de alcanzar un crecimiento sostenido.

Por otra parte, la evolución de la cuenta corriente le permitiría a la región mantener tasas de crecimiento relativamente altas, sin que se prevean fuertes tensiones en el sector externo. Sin embargo, hay aspectos que aún requieren atención, advierte el informe. En especial, es necesario contar con mecanismos que sostengan la competitividad externa de la región, mediante un mayor crecimiento de la productividad.

La mujer debe decidir sobre su cuerpo!

Legisladores y feministas defienden proyecto para permitir el aborto

AFP

25/03/2007 20:10

México, DF. Legisladores de izquierda y grupos feministas de México iniciaron este domingo una campaña informativa para defender un proyecto de ley que pretende despenalizar el aborto en la capital del país, ante la oposición emprendida por colectivos conservadores y la Iglesia.

"No estamos promoviendo el aborto; estamos levantando la voz porque se trata de un problema de salud pública y queremos reconocer el derecho de las mujeres a decidir", dijo a la prensa Elba Garfias, diputada en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) por el Partido de la Revolución Democrática (PRD).

Saliendo al paso de las críticas que ha generado la propuesta que despenalizaría el aborto en esta ciudad, una decena de organizaciones, junto con legisladores de la izquierda, anunciaron el domingo "que se dará batalla" a las posiciones opositoras.

"Que lo entienda la derecha: no se pueden seguir metiendo en decisiones que le atañen sólo a las mujeres. Los abortos clandestinos existen y por eso estamos a favor de la vida de las mujeres que fallecen en salas (quirúrgicas) sin medidas higiénicas", apuntó Leticia Quezada, presidenta de la Comisión de Equidad de la ALDF, dominada por partidos de izquierda.

La Iglesia católica y el Partido Acción Nacional (PAN) manifestaron la semana pasada su oposición al proyecto que modificaría el Código penal de la ciudad, excluyendo las sanciones a la interrupción del embarazo.

La iniciativa, adelantaron las legisladoras, "estará aprobada el próximo 11 de abril", pero antes se organizarán marchas de apoyo y acciones informativas en toda la ciudad.

Ante las manifestaciones públicas que rechazan el proyecto, los colectivos de "la sociedad civil respaldan y apoyan a los diputados" de la Ciudad de México, quienes "han recibido amenazas de los conservadores y de la Iglesia", dijo a su vez María Consuelo Mejía, directora de la organización Católicas por el derecho a decidir.

En uno de los países con mayor número de católicos en el mundo, el Episcopado mexicano advirtió a los diputados que si se aprobara la iniciativa serían excomulgados, al igual que las mujeres que interrumpan su embarazo.

Sin embargo, "hay una gran distancia entre las posturas morales de la Iglesia católica y la práctica real de los creyentes en México, lo que dice la jerarquía no corresponde a lo que la mayoría de católicos piensa", comentó Mejía.

Según cálculos del Consejo Nacional de Población (Conapo), cada año se practican en México alrededor de 102 mil 000 abortos clandestinos, aunque las organizaciones no gubernamentales elevan la cifra a 500 mil.

Inquisicion mexicana

del sendero

Cardenal corrupto se entromete en asuntos de México

Activismo antiabortista
Intromisión del Vaticano en los asuntos de México
Edgar González Ruiz

Quienes durante décadas se han opuesto activamente a la despenalización del aborto, frenando las iniciativas a favor de los derechos de las mujeres y de las libertades individuales, han sido siempre muy pocos pero con grandes recursos económicos e influencia política.
A saber: la jerarquía católica, desde el Vaticano, al igual que algunos dirigentes de otros grupos religiosos, grupos conservadores públicos, como Provida y secretos, como el Yunque, nacionales, como la Unión Nacional de Padres de Familia, e internacionales, como muchas organizaciones y coaliciones que han sido apoyadas por funcionarios panistas, entre las que se cuenta Vida Humana Internacional, una coalición ultraderechista con sede en Miami, al igual que grupos como los Caballeros de Malta y los Caballeros de Colón, al igual que los propios políticos panistas, algunos con más convicción que otros, y empresarios poderosos, como Lorenzo Servitje, el mismo que ha impulsado campañas de censura seudomoralista de los medios de comunicación.
Todos ellos están unidos para encarcelar a las mujeres que pretendan interrumpir su embarazo. Muchas personas no están a favor del aborto, otras muchas sí lo admiten abiertamente, pero sólo esos grupos están interesados en castigar a las mujeres que aborten, pues esa es su propuesta, y por eso se oponen a iniciativas de despenalización del aborto, como la que ahora se discute en la ciudad de México. En el fondo se trata de una lucha contra el estado laico, es decir, para mantener leyes acordes con los preceptos religiosos.

Pocos pero poderosos
El problema es que esos pocos personajes interesados en castigar a las mujeres ahora cuentan con todo el apoyo del gobierno federal, además de que jerarcas del Vaticano intervienen abiertamente y con toda impunidad en los asuntos que sólo conciernen a los mexicanos y ante todo a las mujeres que deciden abortar y a sus parejas si las tienen.
El pasado 24 de marzo, en el “Tercer Congreso Internacional Provida”, el cardenal Alfonso López Trujillo, presidente del Consejo Pontificio para la Familia de la Santa Sede, se opuso directamente a la despenalización del aborto, contrariamente a lo que propone el PRD en el DF
Si bien se trata de una intromisión del Vaticano en los asuntos de México, para apoyar las posiciones derechistas, la jerarquía siempre ha actuado así, pues desde hace años el organismo que preside López Trujillo ha venido organizando eventos públicos y reuniones de políticos en diferentes países de América Latina, y a las que han acudido empresarios mexicanos y personajes de varios partidos, sobre todo del PAN.
Por ejemplo, a principios de los 90, uno de los asistentes a esas reuniones fue José Luis Coindrau, quien firmó en ella compromisos para apoyar leyes contra el aborto, la planificación familiar y el divorcio. Años después, en 1999, y ya como secretario general de Gobierno de Nuevo León, Coindreau apoyaría la fallida iniciativa del clero y del PAN para implantar el llamado “derecho a la vida desde la concepción”.
Sorprendente por el contrario fue la presencia de Jesús Kumate, ex secretario de Salud, en dicho evento para apoyar las posturas de Provida con el pretexto de la “defensa de la vida” y donde el médico criticó la iniciativa del PRD en la ciudad de México. Paradójicamente, el oportunista exfuncionario, que ahora se presta a legitimar con su presencia a los membretes ultraderechistas, como el Comité encabezado por Jorge Serrano Limón, recibió hace unos meses la medalla Belisario Domínguez, que tradicionalmente premia el valor civil. ¿valor civil para alinearse con el gobierno?
Esa retórica de la “defensa de la vida” es tan falsa que ni Kumate ni Serrano Limón, ni otros de los opositores a la despenalización del aborto, han protestado, que se sepa, contra la guerra, ni fueron a manifestarse contra la reciente presencia de Bush en México, un genocida que sin embargo goza de las simpatías de los grupos “provida” porque está contra el aborto y contra el estado laico.
Pero en el evento hubo una señal mucho más peligrosa del compromiso oficialista con la extrema derecha y de la medida en que se pueden poner los recursos públicos en defensa del activismo antiabortista.
Fue la presencia de elementos de la Armada de México, para hacer honores a la bandera en el evento donde López Trujillo se metió en los asuntos del país. Cabe preguntarse: si las armas sirven para matar y son símbolos de muerte, ¿qué tienen que hacer en un acto donde se hace alarde de “defender la vida”?. Pero, más allá de esas incongruencias ideológicas, está el proyecto de hacer a la sociedad mexicana análoga a la de otros países latinoamericanos donde hay un maridaje entre el clero y el gobierno, incluyendo el ejército. Por ahora se está haciendo en un nivel simbólico, pero ya el episcopado prepara iniciativas precisamente para abrir paso a la educación religiosa y a las capellanías militares, entre otras reformas contra el estado laico.
Asimismo, ha sido visible la estrategia mediática de exagerar las protestas contra el aborto, que los grupos provida han organizado en varias ciudades del país, en la misma medida en que muchos medios negaron las multitudinarias manifestaciones que tuvieron lugar en el conflicto poselectoral.
Paradoja, también, del activismo antiaborto es que muchos de sus dirigentes, como Serrano Limón, bien conocido por desviar recursos públicos para comprar tangas y como el propio Alfonso López Trujillo, carecen de autoridad moral para erigirse en árbitros del comportamiento ajeno.

López Trujillo: conservadurismo y abusos
Nacido en Villahermosa, Colombia, el 8 de noviembre de 1935, López Trujillo se ordenó sacerdote a los 25 años, fue consagrado obispo en 1971 y nombrado cardenal (el cuarto en la historia de Colombia) el 2 de febrero de 1983. Desde el 8 de noviembre de 1990, es presidente del mencionado Consejo Pontificio. Antes, fue obispo auxiliar de Bogotá, secretario general del Consejo Episcopal Latinoamericano, CELAM, arzobispo de Medellín, presidente del CELAM y del episcopado colombiano. Es también presidente del consejo de asesores de Priests for Life, organización provida formada por sacerdotes y fundada en San Francisco en 1991.
Ascendente como su carrera eclesial ha sido su fama de prelado conservador, intolerante (ya en su juventud, algunos de sus compañeros de estudios mencionaban que no se podía discutir con él porque no aceptaba los puntos de vista de los demás); amigo de los ricos y poderosos, enemigo de los teólogos de la Liberación.
En 1996, la editorial Temas de Hoy publicó en Bogotá el libro de Hernando Salazar Palacio titulado La guerra secreta del cardenal López Trujillo, donde se incluyen muchos de los datos que se mencionan a continuación.
El 28 de junio de 1986, en vísperas de la visita de Juan Pablo II a Colombia, el entonces arzobispo de Medellín Alfonso López Trujillo se presentó inesperadamente en la parroquia de San Andrés acompañado de tres religiosos y de civiles armados, de quienes no se pudo saber si pertenecían a las fuerzas de seguridad, a un grupo paramilitar o si eran los guardias del prelado. Sin orden judicial y con el pretexto de buscar "armas y explosivos" que pudieran ser usados contra el arzobispo, los empistolados allanaron la casa del párroco Eliseo Tobón, que no llevaba buenas relaciones con él. En realidad, buscaban otra "bomba" que el prelado quería desactivar cuanto antes: una carta firmada por 80 sacerdotes que pedían al Papa investigar sus conflictos son sacerdotes, religiosos y laicos.
Ciertamente, el arzobispo había tenido fuertes problemas con muchos religiosos de su arquidiócesis: con algunos, por profesar la teología de la liberación con otros, como Tobón, porque no le parecían del todo ortodoxos o, peor aún, suficientemente sumisos y respetuosos con él. El 13 de agosto del mismo año, Tobón fue suspendido del sacerdocio por seis meses y separado de su diócesis; si las autoridades civiles indagaron sobre el allanamiento, nunca se supo el resultado de sus investigaciones. Quince años antes, en marzo de 1971, laicos y religiosos inconformes con el nombramiento de López Trujillo como obispo auxiliar de Bogotá señalaron públicamente que sería un obispo para "las clases dirigentes", "con la boca sellada para los ricos pero tremendamente abierta para tratar mal al pueblo sencillo". En su larga guerra contra la teología de la liberación, López Trujillo ha tenido aliados que luego le serían incómodos, como el sacerdote belga Roger Vekemans, quien llegó a Bogotá en 1970, cuando salió de Chile a raíz del triunfo de salvador Allende. En Colombia fundó un centro de estudios y la revista Tierra Nueva, que se convirtió en tribuna contra los "liberacionistas"; en su consejo editorial figuraba Alfonso López Trujillo. Ambos jugarían un papel importante en la preparación de la reunión del episcopado latinoamericano en Puebla en 1979. En 1975, en Estados Unidos y en Francia se dio a conocer que Vekeman había recibido dinero de la CIA, lo que arrojó inevitables sospechas sobre la figura de López Trujillo.
El primero de febrero de 1979, durante la Tercera Conferencia del Episcopado Latinoamericano en Puebla unomásuno publicó una carta escrita por Lopez Trujillo, secretario general del CELAM, al arzobispo de Aracajñu, Brasil, Luciano Cabral Duarte, presidente del Departamento de acción Social de ese consejo episcopal. En ella mencionaba abiertamente que sólo "por presión de otros" fue invitado a la reunión el padre Arrupe, superior de los Jesuitas. Criticaba también a Eduardo Pironio, prefecto de la Congregación para los Religiosos, por no reprender a los eclesiásticos que, como Leonardo Boff, expresaban ideas "confusas y desagradables",. El escándalo que la carta desató en los medios clericales fue para la carrera de López Trujillo mucho más peligros que su relación con Vekemans. Se llegó a pensar que tendría que renunciar a su cargo en el CELAM y abandonar sus ambiciones de ocupar la presidencia de ese organismo; algunas organizaciones de religiosos católicos pidieron su dimisión. Sin embargo, poco después de la reunión de Puebla, López Trujillo fue electo presidente del CELAM en una asamblea que tuvo lugar en la ciudad venezolana de Los Teques. El prelado colombiano se identificaba perfectamente con el férreo conservadurismo del nuevo pontífice y desde su importante posición continuaría orientando en ese sentido las políticas del episcopado latinoamericano y hostilizando a los personajes y organizaciones simpatizantes de la Teología de la Liberación.
En 1981, la organización Pax Christi Internacional acusó a López Trujillo de apoyar al bando conservador en la Iglesia Católica de Nicaragua y exhortar a las autoridades religiosas a adoptar una "línea dura contra la revolución sandinistas". Versiones difundidas años después indicaron la participación de López Trujillo en una operación de la CIA para apoyar a la "contra" por medio de ciertos sectores de la Iglesia. A fines de 1988 una misión internacional presentó un panorama desolador de la posición de la jerarquía católica colombiana -encabezada por López Trujillo- en torno a la defensa de los derechos humanos: la jerarquía denunciaba sólo los abusos de la guerrilla, nunca los de los militares ni los asesinatos de religiosos comprometidos con causas sociales, tampoco apoyaba al Comité de Desaparecidos y bloqueaba los esfuerzos por pedir al Papa su mediación; lo más alarmante de todo era que algunos sacerdotes que habían huido de zonas peligrosas, donde habían sido amenazados de muerte, habían sido devueltos y posteriormente asesinados.
Basten un par de ejemplos para ilustrar los muchos conflictos que tuvo el arzobispo López Trujillo con sus fieles, y que relata Salazar Palacio. Uno de ellos es el registrado en Medellín con Eduardo Toro, religioso que estudió Bellas artes en Roma. Su estilo informal y su amistad con el sacerdote Mario Sierra -otro de los perseguidos por López Trujillo, por haber denunciado irregularidades financieras en la arquidiócesis, como la expoliación de dinero y joyas coloniales de las parroquias- indispuso contra él al arzobispo. El conflicto estalló en 1985 por una exposición de Toro que incluía algunos desnudos tomados de modelos vivos de adolescentes. López Trujillo se escandalizó, lo insultó y amonestó, insinuando además que mantenía relaciones con un joven. Toro le escribió haciéndole ver que, como cardenal, habría de elegir al Papa en la Capilla Sixtina, llena de imágenes de desnudos y preguntándole cómo le hacía para pasearse por los recintos del Vaticano, donde abundan esas imágenes. Citaba además comentarios públicos sobre el comportamiento privado del prelado: "...se habla de sus relaciones no muy santas con jóvenes y dan nombres propios". Por otra parte, ese mismo año, ante un notario de Medellín, el laico Rafael Zapata Posada denunció que fue amenazado e intimidado por el arzobispo por haber denunciado sus atropellos "físicos y morales" contra el párroco Winfrido Vercreaye; en este y en otros casos López Trujillo ha tratado de intimidar a los fieles que tienen desacuerdos con él.
El 17 de agosto de 1984, la periodista Penny Lernoux mencionó en el National Catholic Reporter que un "protegido" de López Trujillo, el obispo Darío Castrillón Hoyos, reconoció haber recibido dinero de un famoso narcotraficante "para obras de caridad". En lo años setenta, Castrillón Hoyos colaboró, igual que López Trujillo, con el belga Roger Vejemans, quien al parecer recibía dinero de la CIA. En su artículo, Penny Lernoux comentaba también que, sin que el arzobispo López Trujillo hiciera nada al respecto, dos sacerdotes de su diócesis habían colaborado públicamente con el movimiento cívico "Medellín sin tugurios", fachadas para las actividades ilícitas del célebre narco Pablo Escobar. Esto era por demás sorprendente, pues López Trujillo ejercía un árida disciplina sobre sus subordinados y estaba bien informado, incluso de sus aspectos privados. Al ser interrogado por la periodista, López Trujillo dijo que no sabía de las actividades de esos religiosos ("Yo no soy detective"), no sabía quién era Escobar. Lo que sí supo fue amenazarla con hacerla deportar (porque según él no tenía derecho a criticar a un obispo en un país católico, como Colombia) y con demandarla judicialmente. Además le dijo que como católica estaba obligada a obedecer al obispo y a no criticarlo.
Como se ha mencionado, López Trujillo colabora con Priests for Life, sacerdotes por la Vida. El 21 de marzo de 1994, en carta enviada al entonces nuevo director de ese grupo, Frank Pavone, López Trujillo le decía: "...Pienso que contar con una política uniforme nacional que prohíba que cualquier figura pública sostenga una posición proelección en cualquier institución católica debería ser una consecuencia normal de la posición provida de la Iglesia y de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos..." (www. org/pfl/catolic.org.trujillo/html).
Durante tres lustros, López Trujillo, al frente del Consejo Pontificio para la Familia ha emitido documentos y declaraciones con lineamientos para la lucha ideológica y política contra la libertad sexual y ha promovido o asistido a incontables reuniones antiabortistas donde se estigmatiza a los sectores liberales y feministas, calificándolos por lo menos como “enemigos de la vida”.

Como salvar PEMEX

Descargar video

También disponible audio en formato mp3:

DESCARGAR AUDIO "SHP - Reforma Fiscal y PEMEX"