Andale AMLO!!!!

HSBC Vs.AMLO: LA OPORTUNIDAD DORADA PARA CREAR UNA BANCA CIUDADANA MEXICANA

POR ALFREDO JALIFE-RAHME (Exclusivo para Voces del Periodista)

Al menos que se trate de una clásica perfidia británica de propiciar la desestabilización financiera de México, la óptima oportunidad para lucirse en el primer aniversario del IFE-fraude se la acaba de brindar a AMLO nada menos que el banco británico HSBC, al haber cancelado la cuenta bancaria del gobierno legítimo. De dos cosas, una: o bien el legendario banco británico HSBC cometió un error gravísimo y muy tonto (lo cual dudamos sinceramente) al cancelar la cuenta del gobierno legítimo en vísperas de la magna manifestación de repudio por el fraude electoral del pasado 2 de julio; o bien, según la mas añeja tradición de la perfidia británica, le puso en bandeja de plata a AMLO la oportunidad dorada de lanzar una banca ciudadana (hipótesis por la cual nos inclinamos mayormente) y así asestarle un golpe doloroso a la banca estadounidense con la que trae pleito comprado desde que la City desplazó a Wall Street como la primera plaza financiera global desde la primera guerra mundial. No vamos a profundizar ahora sobre el retorno de Gran Bretaña como el primer lugar financiero del planeta casi un siglo más tarde como consecuencia de la derrota de EU en Irak, aunque la pérfida Albión haya participado en el infructuoso operativo bélico, pero que salvó su pertenencia a la Unión Europea así como sus conexiones financieras en Asia con Rusia, China e India, además de las petromonarquías árabes y hasta con Irán. Antes de abordar la oportunidad dorada de AMLO para erigirse como el impulsor de la creación de la nueva banca nacional (hoy 92 por ciento en manos extranjeras, en términos de capitalización de mercado), cabe señalar expeditamente que el banco británico HSBC fue creado con sucursales en Hong Kong y Shanghai, como reza su bautismo, para blanquear el dinero proveniente de las dos guerras del opio que Gran Bretaña impuso a China en el siglo XIX. No estamos hablando de un banco cualquiera, como han dado a entender los aldeanazos quienes invocan la pertenencia en su nuevo seno del mazatleco Francisco Gil Dìaz, un pelele del foxiano-zedillista y tuxpeño Roberto Hernández Ramírez, metido en serios problema de reputación en referencia a las descargas nada ortodoxas en la Isla Pájaros de su propiedad en el Caribe. NI el mazatleco Gil Díaz ni el tuxpeño Hernández Ramírez (a quienes por cierto les fascinan los puertos, los mares y sus reflujos) son ni dan para tanto y sería peor que una estupidez del segundo banco más importante del mundo (detrás de Citigroup a quien el tuxpeño, aliado de los hermanos Reyes-Heroles, Jesús y Federico, curiosamente vendió sus acciones pignoradas, por sus adeudos que no pagó a los ciudadanos que rescatamos "su banco" quebrado ) la decadencia de una las mejores bancas del mundo, en este caso la británica, lo cual obviamente no es el caso. De todas formas, sea el caso que fuere y guste, no varía en absoluto la oportunidad dorada de AMLO, quien ya tiene una cruzada de salvación bancaria nacional por la cual luchar en forma efectiva y más allá de los discursos incendiarios que sus enemigos fustigan de estériles y sin concreciones tangibles. Ahora sí que AMLO, presidente del "gobierno legítimo", no podrá quedarse más en la vaguedad de la denuncia estéril sin pasar a actos concretos. Mucho antes de ser candidato presidencial y haber sido desaforado por Martita y luego despojado de su triunfo presidencial en las urnas por el IFE, nadie como AMLO (al unísono de Marcelo Ebrard, su aliado jefe de gobierno del D.F, cuando fungía como senador centrista camachista) ha denunciado, incluso con lujo de un libro y compact disk de apoyo visual, el FOBAPROA/IPAB: el mayor fraude bancario en la historia financiera del México moderno (el otro fue el trueque de espejitos españoles por oro y plata indígenas.) Con o sin fraude electoral de por medio, AMLO fue y será el símbolo de la lucha contra el fraude bancario del FOBAPROA/IPAB, tan peor que el fraude electoral por sus alcances, y que hoy ha resucitado la cancelación de la cuenta bancaria del gobierno legítimo por el banco británico HSBC. Desde luego que el banco británico, muy bien asesorado por los super-eficientes servicios de espionaje de Gran Bretaña, quizá entre los mejores del mundo (remember James Bond ), sabe muy bien que no canceló una cuenta común y corriente, sino de quien representa, en el peor de los casos, una potencia social de primer nivel en México, a quien la maquinaria electoral martiana-foxiana-zedillista-salinista-delamadridista-empresarial le aplicó una "elección de Estado" (para citar al insigne filósofo de moda Madrazo Pintado, quien se pinta solo) con una "derrota" muy apretada de un poco más de medio punto porcentual según los cálculos del IFE, a quien le tomó una semana cocinar las cifras, pero sin realizar el recuento de cifras voto por voto como reclamaba la población. En el mejor de los casos, HSBC cancela la cuenta en forma provocativa del verdadero presidente que elegimos los mexicanos lo cual cobra una afrenta sin precedentes en la historia financiera del país lo cual obliga no solamente a resucitar el fraude del FOBAPROA/IPAB, sino, mejor aún, a replantear la vigencia de todo el putrefacto sistema bancario seudo-nacional que controla la banca de EU (explícitamente la Reserva Federal) a través del enajenante truco monetarista central-banquista de la "autonomía" de BANXICO manejada por el cordobista-zedillista hiper-mediocre Guillermo Ortiz Martínez, quien ha dilapidado la riqueza nacional de las reservas para beneficiar al dólar de EU en detrimento del bien común nacional. A reserva de poner en tela de juicio el alcance de su gobierno legítimo y sus actos carentes de solvencia específica, son momentos en los que AMLO deberá pasar a la contraofensiva financiera, en la que lo apoyaremos la aplastante mayoría REAL (en el doble sentido de la palabra) de los mexicanos hambrientos de justicia ontológica, para proponer y tomar medidas susceptibles de transformar (la palabra favorita de AMLO) en forma legal y pacífica al sistema financiero putrefacto de México que se ha eternizado un cuarto de siglo en el poder. Más allá de la cacofonía primitiva y aburrida de los lorocutores ( empleaditos desechables de oligopolistas empresarios enemigos del bien común nacional: ¿Quién se acuerda del empleadito Guillermo Ochoa cuando le quitaron su juguetito y biberoncito ?), nadie posee en estos momentos en todo el país la autoridad axiológica de haber sufrido el martirio de cuatro afrentas que han marcado la historia moderna de México:1) fraude en la gubernatura de Tabasco por el lastimoso pregonero de las traiciones ajenas (el pestilente hankista Madrazo Pintado); 2) el fraude FOBAPROA/IPAB; 3) el desafuero martiano ,y 4) el IFE-fraude. Más allá de las denuncias archi-sabidas, el gobierno legítimo es requerido pasar a la acción con medidas tangibles que beneficien al bien común nacional y que sus asesores jurídicos del más alto nivel intelectual y deberán sopesar, sin violentar nuestra Constitución y en el marco de la lucha pacífica que enarbola el maravilloso Poder Ciudadano que colmará como nunca las calles de la ciudad de México este primer aniversario del Martiano IFE-fraude, como cántico de supervivencia de una nación que no se da por vencida, pese a la adversidad y que sorprenderá a propios y extraños de su capacidad de recuperación sicológica. El Poder Ciudadano posee la mística de la que carece la disoluta "fiscalcracia", que bajo el manto neoliberal lleva un cuarto de siglo tanto en el poder como de desmantelamiento de las estructuras nacionales para beneficiar exclusivamente a las trasnacionales depredadoras y a la parasitaria plutocracia local. El primer acto deberá consistir en la abolición de la "autonomía" del parasitario BANXICO, un verdadero "estado dentro del Estado", que ha servido mas los intereses foráneos que los nacionales. Que conste que no vamos proclamar el exorcismo para nacionalizar la banca extranjera que posee el 92 por ciento de nuestra otrora banca "nacional". Nuestro objetivo consiste en re-crear una genuina banca mexicana, a la par de aseguradoras mexicanas (TODAS regaladas por Salinas, Zedillo y Fox), para competir con la banca trasnacional y no tener que padecer las torturas que le propinaron a AMLO al cancelarle en forma perentoria la cuenta bancaria del "gobierno legítimo". Los asesores jurídicos y financieros de AMLO deberán pensar en que los ahorros de los mexicanos (incluidas sus pensiones que pretenden despojar las mismas aseguradoras foráneas con los apátridas y amátridas diputaditos y senadorcitos muy diminutos para el grandioso momento histórico que vive nuestro país en las calles democráticas y que la furia electoral ciudadana más pronto que tarde colocará a cada uno en su justa dimensión; es decir, en la nada nihilista), sus depósitos y sus intereses formen parte de una nueva banca ciudadana mexicana para los mexicanos cuando la banca anglosajona pretende propinar el último clavo del féretro financiero nacional con las medidas unilaterales y extraterritoriales de HSBC que se atrevió a cancelar una cuenta repleta de símbolos: la del gobierno legítimo de AMLO. Se requiere de creatividad jurídica y financiera para resucitar la nueva banca mexicana que reclaman los ciudadanos, ya sea mediante cajas de ahorros, o a través de "casas de depósito" interconectadas con otros bancos nacionales, aunque todavía muy diminutas, y no pocos entre ellos propiedad de ex presidentes o de esposas de ex presidentes . Ante la afrenta intolerable del banco británico HSBC, el Poder Ciudadano exige tener su banca mexicana, en el D.F., en las regiones, en los estados y en los municipios: bancos mexicanos que florezcan con capitales de los propios mexicanos y los ahorros y depósitos de los mexicanos, en conjunción financiera con nuestros hermanos migrantes. Ante la obstrucción trasnacional de BANXICO, quizá sea más fácil y sencillo abrir un banco mexicano en Los Ángeles o en Chicago (lo mismo es extensivo en Canadá con sus famosas y exitosas cajas de ahorro, o en otra parte del mundo globalizado; no se van a cerrar las puertas ante la voluntad creativa del Poder Ciudadano), para luego colocar una sucursal en México (en todo su territorio) para que los ciudadanos mexicanos excluidos en sus cuentas bancarias puedan depositar la liquidez del patrimonio ciudadano nacional rechazada por la banca trasnacional con la connivencia de agringado BANXICO y el congresito que nos tocó padecer. Ahora toca el turno al gobierno legítimo de AMLO de actuar e implementar la voluntad nacional antes que la nación de ciudadanos libres se lo reclamemos y se vuelva irrelevante por apraxia: término neurológico que significa ausencia de acción.